Desde luego esta vez si que podrá decir que el viaje valió la pena. Bubba Watson firmó una tarjeta de 63 golpes que, si bien no fue la mejor del día, ese honor recayó en Stewart Cink con un golpe menos, le sirvió para hacerse con su tercer título de la temporada.
Watson comenzó la semana discreto, empatando con el campo y sin dar muchos atisbos de que pudiese llegar el triplete. Sin embargo, el viernes las cosas cambiaron y comenzó el festival de birdies para el golfista de Florida que acabó poniendo 63 golpes en su marcador. Seis y un eagle llegaba a firmar antes de que el hoyo 16 le dejase con su único error de la jornada.
Un solitario bogey que también repetiría en los 63 impactos que presentaba su tarjeta dominical, aunque esta vez sería en el hoyo 8 y que quedaría perdido entre los ocho birdies con los que ganó el Travelers Championship después de escalar cinco puesto. Una remontada que quedaba en nada si la comparamos con los veinte que ganó Cink tras entregar su cuarta tarjeta con diez birdies y dos bogeys para acabar segundo en un grupo donde también recalaron Beau Hossler, J.B, Holmes y Paul Casey a quien se le escapó la victoria en una jornada en la que estuvo muy fallón.